Con todo el orgullo que los esclavistas de la humanidad quieren doblegar, canto esta canción en homenaje a mi Raza Aria. Pobre y más que pobre, miserable, infeliz e injusto, aquel que reniega de su sangre, de su estirpe, de su Raza, heredada a través de los milenios.
Y si alguien no tiene claro esto, debería enterarse en qué mundo vive. Nada mejor para ello que leer este volumen que contiene los tres libros de política más importantes del siglo XXI
YO SOY ARIO
Señor de muchos caminos
amante fiel y guerrero,
Yo soy de la Raza Aria
de su estirpe, heredero.
Una raza que de vieja,
perdida lleva su historia
cabalga contra la muerte,
y su destino es la Gloria.
Vengo de tierras lejanas,
de allá donde siempre es día,
España es Nación y Patria,
Walhalla es la Tierra mía.
Mi amiga es la alegría,
mi enemiga la tristeza
peleo ante la injusticia,
me rindo ante la belleza.
Y auque no uso corona,
soy de reyes, Soberano,
con la guitarra en la espalda
y con la espada en la mano.
Odín y Wotán me guían
por los caminos mortales...
Mi raza es la luz del día
espantando a los infernales.
Gabriel de Alas